954 122 462 / 674 59 00 07

La relación entre la salud bucal y la salud cardiovascular ha sido un tema de creciente interés en el ámbito médico durante las últimas décadas. Diversos estudios han demostrado que las enfermedades de las encías, como la gingivitis y la periodontitis, no solo afectan la cavidad oral, sino que también pueden tener un impacto directo en el sistema cardiovascular, aumentando el riesgo de padecer enfermedades cardíacas. Pero, ¿cómo sucede esto y qué tan relevante es cuidar de nuestras encías para proteger nuestro corazón?

La conexión entre la salud periodontal y las enfermedades cardiovasculares se centra en la respuesta inflamatoria del cuerpo. Las bacterias periodontales y los productos de su inflamación pueden ingresar al torrente sanguíneo a través de las encías lesionadas. Una vez en la sangre, estas bacterias pueden contribuir a la formación de placas en las arterias (aterosclerosis), endureciendo las paredes arteriales y aumentando el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares, como infartos de miocardio y accidentes cerebrovasculares (ACV).

Datos médicos contrastados:

  • Un estudio realizado por The American Journal of Cardiology encontró que las personas con periodontitis tienen entre un 25% y un 50% más de riesgo de desarrollar enfermedades cardíacas en comparación con aquellas con encías saludables.
  • Investigaciones del Journal of Clinical Periodontology también muestran que los pacientes con enfermedad periodontal avanzada tienen un 49% más de probabilidad de sufrir un evento cardiovascular, como un ataque cardíaco, que quienes no padecen esta afección.

La inflamación crónica es un factor clave en la relación entre las enfermedades de las encías y los problemas cardíacos. La periodontitis es una enfermedad inflamatoria crónica y, al igual que las enfermedades cardíacas, la inflamación de bajo grado a largo plazo puede dañar los vasos sanguíneos y contribuir a la formación de coágulos.

Este proceso inflamatorio crónico es comparable al que ocurre en las arterias coronarias. Por lo tanto, cuando una persona tiene ambas afecciones, la inflamación de las encías puede empeorar la inflamación en las arterias, contribuyendo a un mayor riesgo de aterosclerosis.

El papel de la higiene bucal en la prevención

Mantener una buena salud bucal no solo es crucial para evitar problemas dentales, sino que también puede reducir el riesgo de enfermedades cardíacas. Cepillarse los dientes al menos dos veces al día, usar hilo dental regularmente y acudir a revisiones dentales periódicas son las primeras líneas de defensa contra las enfermedades periodontales.

Es importantísima también, como siempre os decimos, la prevención: Cuidar tu salud bucal a través de buenos hábitos de higiene y visitas regulares al dentista no solo mejorará tu bienestar dental, sino que también podría ayudarte a proteger tu corazón a largo plazo.