Se cree que si se rompe un diente está todo perdido pero te dejamos aquí los pasos que debes seguir para salvarlo o evitar complicaciones:
La rápida reacción y los cuidados inmediatos son cruciales para minimizar el daño y prevenir complicaciones.
Primero es importante determinar la extensión del daño. No es lo mismo un pequeño astillado que una rotura completa del diente. Se puede romper ligeramente la superficie del esmalte, la dentina o sufrir una rotura que afecte a la estructura del diente o exponer la pulpa dental, que suele ser doloroso. Si se fractura la raíz puede ser difícil de detectar,salvo por un profesional.
Después de un accidente de este tipo enjuaga la boca suavemente con agua tibia para limpiar cualquier resto de comida o fragmentos de diente. Este gesto te ayudará a prevenir infecciones y facilita la evaluación del daño. Si hay sangrado, aplica una gasa limpia o un paño suave en el área afectada.
Para aliviar el dolor y la hinchazón coloca una compresa fría en la mejilla sobre el área afectada. También puedes tomar analgésicos de venta libre como el ibuprofeno o el paracetamol.
Si es posible recupera el fragmento del diente roto manipulándolo con cuidado, tocando solo la parte superior y evitando la raíz. Coloca el fragmento en solución salina o agua para mantenerlo húmedo.
Por supuesto visita al dentista lo antes posible. Incluso cuando el daño parece menor una evaluación profesional es esencial para determinar el tratamiento adecuado.
Puede que necesites pulir bordes afilados, reconstruir el diente, realizar una endodoncia, extraer el diente,reemplazarlo…
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